domingo, 24 de febrero de 2013

Bizcocho de leche y canela para acompañar una fría mañana de invierno!

Parecía que no iba a llegar nunca el fin de semana… pero lo positivo es que siempre llega. No importa la de locuras que puedan pasar en el despacho; los momentos de risas y los de pánico acaban desvaneciéndose cada viernes pasadas las nueve…
El sábado venía amenazando nieve, y aunque no me creí en modo alguno la previsión del tiempo, la verdad es que tuve que rendirme ante los hechos: estaba nevando!! Sí, todavía no había amanecido cuando ya estábamos saltando de la cama. Me dirigí a la cocina para ir preparando un buen desayuno cuando mi media naranja se dio cuenta: sí, El Hombre del Tiempo había acertado y todos los coches aparcados en nuestra calle tenían una graciosa capa de nieve. Es curioso, pero ver nevar sigue teniendo en nosotros ese efecto infantil de alegrarnos el alma… Aunque es mucho más fácil disfrutar de la nieve cuando puedes quedarte acurrucado en el sofá disfrutando de un chocolate caliente!
En cualquier caso, lo que sí es verdad es que el tiempo gélido se llevó con él todos los planes que habíamos organizado… eso de acabar patinando sobre hielo llevando el coche… no nos apetecía nada, así que decidimos aplazar nuestra escapada para el próximo fin de semana. Y claro, frente a lo que parecía iba a ser un fin de semana muuuuyyyyy casero nada mejor que algo que nos reconforte junto a algo calentito, verdad? Y ¿qué hay mejor que estar tranquilamente en tu sofá con un buen libro, las niñas en nuestra falda y un buen tazón de algún exótico té? Pues que este venga acompañado de un poquito de bizcocho esponjoso y aromático… ummmm, delicioso! Y esto es lo que os traigo hoy, un cachito de cielo que os hará la vida mucho más agradable! Aquí os dejo la receta:
Bizcocho de leche y canela (receta de Hilmar de Mis recetas favoritas)


Ingredientes
250 gr azúcar
3 huevos
1 cucharadita (tsp) canela molida
1 cucharadita (tsp) impulsor (baking powder)
12 gr mantequilla a temperatura ambiente
250 gr leche (en mi caso, semidesnatada)
250 gr harina leudante
Elaboración
 Esto va a estar listo en un santiamén, así que ya podemos ir precalentando nuestro horno a 180°C.
Tamizaremos la harina junto con el impulsor y lo reservaremos. En un bol grande batimos los huevos con el azúcar y la canela hasta que nos quede una mezcla espumosa y cremosa. En este punto ya podemos añadir la mantequilla y la leche hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.
Es el momento de ir añadiendo la harina poco a poco y suavemente hasta que esté totalmente integrada.
Cogemos nuestro molde para bizcochos y lo engrasamos a conciencia. Vertemos en él nuestra masa y lo horneamos durante unos 45 minutos o hasta que esté dorado y al pincharlo con un palillo este salga completamente limpio.
Ya podemos sacarlo del horno y dejarlo unos 10 minutos antes de desmoldarlo. Ahora ya solo nos quedará dejarlo enfriar totalmente sobre una rejilla antes de poder hincarle el diente.  Aquí tenéis el resultado:



Et c’est tout! Rapidísimo, verdad? Pues así de rápido desaparecerá de vuestra cocina. Os animáis?

domingo, 17 de febrero de 2013

Pastas de chocolate glaseadas

¿Sabéis lo que me encanta? Desayunar tranquilamente con mi media naranja y acabar mi tazón de té mientras se va haciendo de día…
Ayer por la mañana nos levantamos temprano y nos fuimos de compras… sí, sigue sin ser lo que más me gusta en esta vida, pero de vez en cuando no hay más remedio. As usual, no encontré nada que me convenciese, así que no tengo trapitos nuevos, pero da igual, porque para acabar con la frustración que me provoca ir de shopping me fui a la tienda de la que siempre salgo cargada: la librería!! Y sí, ahí sí que me explayé un poco (y estoy encantada con mis nuevas incorporaciones). Llevaba días con ganas de comprarme un par de libros de Hannah Arendt y ayer, finalmente, fue el momento ideal. Ahora solo hace falta que encuentre el tiempo para poder leérmelos, pero seguro que les hago un hueco.
Pero ¿sabéis qué ha sido lo más importante del fin de semana? Que ha sido nuestro aniversario! Sí, cómo pasa el tiempo… La verdad es que somos unos privilegiados, por habernos encontrado y por seguir ilusionados con nuestro proyecto de vida.
Pero bueno, volviendo a la tierra (que me estoy poniendo más rosa de lo habitual)… hoy os traigo unas galletitas que alegran cualquier sobremesa. Son un pequeño suspiro, el bocado perfecto para acompañar un buen expresso. Y el olor a chocolate que os dejará en vuestra casa… indescriptible! Tenéis que probarlas porque seguro que repetiréis. Aquí os dejo la receta:
Pastas de chocolate glaseadas (receta de My Little Things)
Ingredientes
150 gr chocolate negro, fundido y reservado
100 gr azúcar
220 gr harina de todo uso
½ cucharadita (tsp) de sal
60 gr de mantequilla en pomada
2 huevos (L) a temperatura ambiente
1 cucharadita (tsp) impulsor (baking powder)
1 cucharadita de vainilla en polvo
Azúcar glas
Elaboración
En un bol grande batimos la mantequilla en pomada con el azúcar. A continuación añadimos los huevos y seguimos batiendo.
Lo siguiente será añadir el chocolate fundido (en mi caso en el microondas) ya frío. Por último, añadimos la harina, la sal, la levadura y la vainilla (todo tamizado) y lo mezclamos bien.
Cuando ya estén todos los ingredientes debidamente integrados tapamos el bol con un poco de papel film y dejamos enfriar la masa en la nevera para que coja consistencia (unos 45’).
Aprovechamos estos minutos para ir recalentando nuestro horno a 180°C.
Una vez ya tenga la consistencia adecuada tan solo tendremos que ir formando bolitas. Para que sean todas del mismo tamaño os podéis ayudar de una cuchara de postre, de forma que siempre cojáis la misma cantidad de masa. Cuando ya le hayamos dado forma de bola a cada porción la rebozaremos en azúcar glas. Intentad no manipular demasiado la masa para darle forma ya que se os acabará quedando toda la masa en la palma de la mano en cuanto vuelva a tomar temperatura.
Las iremos colocando en nuestra bandeja de horno, debidamente forrada con papel de hornear, y las hornearemos unos 7-10’ (en mi caso 7’). ¡Ya estarán listas! El olor a chocolate que van desprendiendo es realmente turbador J! Aquí tenéis el resultado:




Et c’est tout! Más fácil imposible!! Os animáis?

domingo, 10 de febrero de 2013

Hamburger Buns

Sí, piqué bien el anzuelo. 

El viernes vimos la previsión del tiempo y, si bien es cierto que dijeron que bajarían un poco las temperaturas, también dijeron que saldría el sol… así que lo tuvimos claro: primera escapadita con las motos!! Quedamos con unos amigos en que los iríamos a visitar para hacer un buen desayuno y charlar largo y tendido. Viven en una casa estupenda fuera de Barcelona… no muy lejos, a unos 50 minutos en coche/moto, así que creímos que sería una buena manera de hacer un recorrido un poco más largo con las nuevas niñas mimadas de la casa…  Y sí, el sol salió, pero ¡qué frío! Así que, aviso a navegantes, dejad las escapaditas para más adelante porque ni yendo totalmente equipados te libras de acabar tiritando J! Bueno, también está la opción de ir haciendo tiradas cortas e ir parando para tomarte algo calentito cada 50 km… eso sí, tal vez tardes una vida en llegar a cualquier sitio J!
En cualquier caso, logramos llegar y disfrutar de una mañana estupenda con paseo por el campo incluido, por lo que, aun teniendo en cuenta el frío, valió la pena.
Esta mañana me he levantado con unas ganas bárbaras de preparar un poquito de pan (así como con unas agujetas tremendas en la espalda… es lo que tiene ser novata con la moto), por lo que me he puesto a repasar mis recetas infalibles. Me he decantado por unos fantásticos panecillos para hamburguesa. Mi sister venía a visitarnos y me quedaba una hamburguesa de espinacas con algas en la nevera que pedía a gritos ser devorada así que... manos a la obra! Aquí os dejo la receta:

Hamburger Buns  (receta del libro Pan de Linda Collister) 


Ingredientes (para unos 8 panecillos aprox.)
325 gr harina de fuerza
½ cucharada (tbsp) de sal marina
1 cucharada (tbsp) azúcar blanquilla
25 gr mantequilla, a dados
7,5 gr levadura fresca
200 gr leche (semidesnatada en mi caso) tibia
1 huevo (M), batido (en mi caso, le puse un L)
Semillas de sésamo para decorar
Para glasear
3 cucharadas de leche
Una pizca de sal
Elaboración
En un bol grande mezclamos la harina, la sal y el azúcar. Añadimos la mantequilla cortada en dados y frotamos con las yemas de los dedos hasta que nos quede la mezcla como unas migas. Haremos un hueco en el centro.
En un bol pequeño desmenuzaremos la levadura fresca y la mezclaremos con un cuarto de la leche tibia hasta que nos quede un líquido homogéneo. Vertemos la mezcla en el hueco de la harina y añadimos el resto de la leche y el huevo. Nos quedará una masa pegajosa. Linda Collister dice que vayamos añadiendo harina (de cucharada en cucharada) hasta que no esté pegajosa… mi recomendación es no añadir harina. Sí, al principio la masa estará… bastante pegajosa, pero con el amasado francés, en unos 10 minutos (amasado a mano), tendrá una textura fantástica, elástica, sedosa y homogénea, sin haber tenido la necesidad de ponerle ni un gramo más de harina. Lo dejo a vuestra elección.
En cualquier caso, cuando la masa esté lista es el momento de engrasar ligeramente un bol grande y dejarla fermentar tapada con un plástico y un trapo en un lugar cálido hasta que haya doblado su volumen, 1h aproximadamente (a mí hoy me ha costado 1h 30’).
Cuando ya haya doblado su volumen la volcaremos sobre nuestra superficie de trabajo muy ligeramente enharinada y la dividiremos en tantas porciones como panecillos queramos. A mí me han salido 8 panecillos de unos 85-90 gr aproximadamente. Les daremos forma redonda bien fuerte, dejándolos muy lisos. Los iremos colocando bien separados en la placa de hornear, que habremos forrado con un poco de papel de horno. Las aplanamos ligeramente y envolvemos la placa con una bolsa grande de plástico. La inflamos, la cerramos, la cubrimos con un trapo y dejamos levar nuevamente unos 45 minutos – 1 hora, hasta que los panecillos casi hayan vuelto a doblar su volumen.
Aprovecharemos  este tiempo para precalentar nuestro horno a 230°C.
Cuando ya estén en su punto los pincelaremos ligeramente con la leche mezclada con el punto de sal y los espolvorearemos con las semillas de sésamo.
Ya es el momento de meternos en el horno durante 5’. Pasados estos primeros 5’ bajaremos la temperatura del horno a 200°C y los seguiremos horneando otros 5-10’ (en mi caso 7’), hasta que estén firmes y doraditos.
Ya solo nos queda sacarlos del horno y dejarlos enfriar sobre una rejilla. Para mantener las cortezas blanditas los dejaremos enfriar tapados con un paño seco. Este es el resultado:




Et c’est tout! Están riquísimos y puedes hacerlos el mismo día que quieras servirlos. Ah, y también puedes congelarlos para tenerlos siempre listos si surge la necesidad J. ¿Os animáis?
Enviada a YeastSpotting

domingo, 3 de febrero de 2013

Buttermilk Biscuits and Oat and Bran Cookies

¿Habéis visto qué sol más fantástico ha aparecido hoy en el cielo? Sí, es cierto, acompañado de viento, pero ¿habéis visto el solete? A mí me ha dejado totalmente fascinada y de un buen humor espectacular J. Tal vez también haya ayudado el hecho de que por fin he sido capaz de levantar la mirada de mis apuntes para disfrutar de una buena taza de té y de una mañana más tranquila de lo habitual…
Ha sido una semana diferente. En un golpe de efecto, me cogí unos días en el despacho y, acompañada de mi media naranja, me lancé a la carretera. Objetivo: tierras andaluzas! Estuvimos un par de días disfrutando de familia y amigos, pero lo bueno siempre acaba pronto y el miércoles ya estábamos volviendo. El trabajo y el primer parcial de Ortomolecular me esperaban ansiosos…
Pero hoy es domingo y no hay nada mejor para disfrutar del fin de semana que algún regalo para el alma recién horneado. Y eso es lo que os traigo, un pedazo de cielo que podéis acompañar con dulce o con salado: Buttermilk biscuits!
Si no los habéis probado nunca seguro que os robarán el corazón. Son fáciles, rápidos de preparar y están la mar de ricos. Aquí os dejo la receta.
Buttermilk Biscuits (receta de Weekend Bakery)



Ingredientes (para unos 12):
350 gr harina de todo uso
7 gr sal
12 gr impulsor (baking powder)
¼ cucharadita (tsp) bicarbonato sódico
15 gr azúcar
115 gr mantequilla sin sal fría cortada en cubos
220 gr buttermilk aproximadamente
Elaboración:
En un bol grande mezclamos la harina, el impulsor, el bicarbonato sódico, la sal y el azúcar. Añadimos los cubos de mantequilla bien fría y lo mezclamos. Nos quedará una apariencia como de migas con trocitos de mantequilla del tamaño de mini guisantes (yo me ayudo de un tenedor J). En este punto ya podemos añadir unos 150 gr de buttermilk e ir mezclando. La masa se irá uniendo sin necesidad todavía de amasar. Iremos añadiendo buttermilk hasta que ya no queden ingredientes sueltos. En mi caso utilicé los 220 gr, pero mejor si la vamos añadiendo poquito a poco. Nos quedará una masa un poco pegajosa. El secreto está en no manipularla en exceso ya que nos interesa que conserve una consistencia ligera.
Es el momento de volcar nuestra masa sobre la superficie de trabajo ligeramente enharinada (solo ligeramente!). Con las manos también enharinadas iremos dando forma de rectángulo a nuestra masa y la doblaremos como si fuese una carta. Giramos 90°C nuestra masa y volveremos a hacer el mismo proceso, es decir, le daremos nuevamente forma de rectángulo y la volveremos a doblar como si fuese una carta. Una vez hecho esto, ya podemos estirar por última vez nuestra masa dándole forma rectangular y dejándola de unos 2,5 cm de grosor.
Con la ayuda de un cortapastas redondo ves cortando la masa. También puedes hacerlos de forma cuadrada, como más te guste. Ves colocándolos en la bandeja del horno, debidamente forrada con papel de hornear. Cúbrelos con papel film y déjalos descansar durante unos 15 minutos.
Aprovecha ese tiempo para precalentar el horno a 230°C.
Opcionalmente puedes pintarlos con un poco de mantequilla justo antes de meterlos en el horno.  Hornéalos unos 13-16 minutos sin quitarles el ojo de encima ya que se nos pueden tostar muy fácilmente. Sírvelos calientes. Si prefieres mantenerlos calentitos un poco más tan solo tienes que cubrirlos con un trapo después de hornearlos. La buena noticia es que también puedes congelarlos. Para que vuelvan a estar igual de deliciosos tan solo tendrás que darles un punto de horno o directamente ponerlos sobre el tostador durante unos minutos. Este es el resultado:




Y luego están las Oat and Bran Cookies, que tal vez no sean tan glamourosas, pero también nos pueden servir de snack saludable si nos ataca el gusanillo entre horas. Puedes comerlas solas o con una loncha de pavo braseado… a tu elección! Aquí os dejo la receta:
Oat and Bran Cookies (receta de The Australian Women’s Weekly)
Ingredientes (para unas 30 galletas):
150 gr harina de todo uso
60 gr salvado de trigo
60 gr copos finos de avena
½ cucharadita (tsp) bicarbonato sódico
60 gr mantequilla sin sal, cortada en cubos
110 gr azúcar
1 huevo (L)
2 cucharadas (tbsp) de agua, aproximadamente
Elaboración:
Muele ligeramente los copos de avena y mézclalos con la harina, el salvado, el bicarbonato sódico y la mantequilla hasta que os quede como unas migas. Añade el azúcar, el huevo y el agua suficiente para formar una masa firme. Amásala un poco sobre la superficie de trabajo ligeramente enharinada. Cuando ya esté lista forma una bola, cúbrela con papel film y déjala reposar durante unos 30 minutos en la nevera.
Ya es momento de precalentar el horno a 160°C con ventilador y de forrar la bandeja del horno con un poco de papel de hornear.
Divide la masa en dos partes. Coge cada una de las partes y ponlas entre dos papeles vegetales. Con la ayuda de un rodillo ves estirando la porciones de masa hasta que te queden de un grosor de unos 5mm. Con la ayuda de un cortapastas ves cortando la masa y ves colocando las galletas en la bandeja de hornear un poco separadas entre sí. Hornéalas durante unos 15 minutos. Cuando estén listas déjalas enfriar sobre una rejilla. Este es el resultado:




Et c’est tout! Espero que os animéis con alguna de las dos recetas, y ¡have a nice week!
Recipes in English
Buttermilk Biscuits (Weekend Bakery)
Ingredients
350 g all purpose flour
7 g salt
12 g baking powder
15 g sugar
115 g cold butter in cubes
About 220 g buttermilk
Butter for brushing tops, optional
Method
In a big bowl combine flour, baking powder, baking soda, salt and sugar. Add the cold butter in cubes and very coarsely rub it into the flour, making sure there are plenty of pea size morsels of butter in the mixture. Add 150 g of the buttermilk, stir with the back of a kitchen knife until it just comes together. The dough should come automatically together while stirring, without kneading, and there should be no crumbs left on the bottom of the bowl.  Add more buttermilk to absorb all the morsels and crumbs until you have a shaggy mass.
Turn the dough out on a floured work surface. With floured hands, gently pat the dough into a rectangle. Fold the dough into thirds, letter style. Rotate the dough 90 degrees and again shape the dough into a rectangle and fold into thirds. Pat again the dough into a rectangle making sure it is about 2.5 cm thick.
Preheat your oven to 230°C.
Cut out round or square shapes. Put them on a lined baking tray. Cover the biscuits with floured clingfilm and leave to relax for about 15 minutes.
Now brush the tops of the biscuits with butter if you like. Put the tray in the oven. The biscuits take about 13-16 minutes of baking. Keep a close eye on them; they should be pale to golden brown in color. Remove from the oven and serve warm.
Oat and Bran Cookies (The Australian Women’s Weekly)
Ingredients (makes 30)
150 g all purpose flour
60 unprocessed bran
60 g rolled oats
½ teaspoon bicarbonate of soda
60 g butter, chopped
110 g caster sugar
1 egg
2 tablespoons water, approximately
Method
Process flour, bran, oats, soda and butter until crumbly. Add sugar, egg and enough of the water to make a firm dough. Knead dough on lightly floured surface until smooth. Cover and refrigerate 30 minutes.
Preheat oven to moderate (180°C/160°C fan-forced). Line oven trays with baking paper.
Divide dough in half. Roll each half between sheets of baking paper to about 5mm thickness. Cut dough into 6-7cm rounds. Place on trays 2cm apart. Bake about 15 minutes. Stand cookies on trays 5 minutes and transfer to wire rack to cool.